Era de día, entonces anocheció, la luna se levanto bostezando, se tapaba la boca con la mano izquierda y con la derecha saludaba al arlequín, que cantaba una canción desafinado, el en realidad tenia muy buena voz, pero le parecía mejor cantar así, el efecto en su publico, era mas... "intenso", caminaba cantando y dando volteretas que hacían sonar los cascabeles de su gorro cuando rozaban el piso, sus zapatos se arrastraban y su mandíbula dibujaba extrañas morisquetas "saludos" le dijo respondiendo, demasiado tarde, porque la luna ya se había cansado de esperarlo y había amanecido, sin embargo el sol creyendo que se refería a el, le contesto "buen día"...
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